Es una alternativa asistencial pensando en la salud desde un punto de vista integral, ligado a valores como la convivencia familiar, entorno, afecto y responsabilidad participativa y conjunta no exclusivamente médica.
Esta modalidad de atención requiere un gran compromiso del equipo de salud quien se relaciona con el paciente es un escenario ajeno al soporte institucional que le confiere el hospital. Esta situación exige a los profesionales elaborar respuestas inmediatas y puntuales generando así una actitud Pro-activa frente a situaciones físicas y psíquicas.
El objetivo es potenciar la calidad de vida del paciente, respetando el derecho a la intimidad, a permanecer en su ambiente, a compartir con su entorno afectivo esta etapa de su vida y a la vez permite a sus seres queridos proporcionarles cuidados con efectividad y cariño.
Aquellos que poseen contratos de internación por prestaciones.
Al sobrepasar el número fijo de camas contratadas para evitar la utilización de instituciones periféricas.
Las instituciones que cuentan con sanatorios propios y necesitan el desbloqueo de camas.
Entidades que no poseen soporte profesional suficiente para cubrir la demanda interna.
Las instituciones que buscan mejorar la atención a sus beneficiarios, con un nuevo servicio profesional.
Por la necesidad del paciente y la institución de ofrecer un servicio integral domiciliario al paciente.